domingo, 2 de junio de 2013

Epitafios, obituarios y otros condimentos.


En la lápida de un publicista.

Raspe para saber quién yace aquí.


En la lápida de un político.

Orine en otro lado.


En la lápida de un marino.

Aquí subyace un subordinado suboficial de un submarino


En la entrada de una gran metrópoli

Aquí yace la crisis del capitalismo quién resucita cíclicamente.



Encuentro

Llegue temprano desconfiando de mi mismo, me senté a esperarla. Pasaron dos, tres colectivos, perdí la cuenta. Pasó gente caminando para acá y para allá, un perro me hizo compañía, pero perdió la paciencia. Pasó la tarde, pasaron los  puntuales, volvieron los que iban para acá y para allá. Llegó la noche. Ella siempre llega puntual en verano, con sus luces a gas amarillento. Vacilé, maldije, odié. Volví a casa confiando en mi desconfianza, arrastrando mi propio peso por no tener alas.

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